Tablas de Daimiel

En la Mancha, la más extensa de las llanuras peninsulares, se encuentra un complejo palustre que, hasta hace poco tiempo tenía una superficie de unas 25.000 ha. y era considerado una de las cuatro áreas españolas de importancia internacional para las aves acuáticas. La diversidad de hábitats y especies de la denominada «Mancha Húmeda» tenía mayor relevancia si cabe al estar en una región tan seca como la cuenca alta del Guadiana.

El complejo lagunar está formado por un rosario de lagunas humedales y encharcados que responden a distinta tipología según sus orígenes. En el Campo de San Juan predominan las lagunas endorreicas, es decir, acumulaciones de agua en depresiones  del terreno que suelen tener un carácter salino más o menos marcado. En el Campo de Montiel se encuentran las Lagunas de Ruidera que son el mejor y más conocido ejemplo de las de origen travertínico. Las más escasas se forman por la acumulación de agua en antiguos cráteres, existiendo algunos ejemplos de este tipo en el volcánico Campo de Calatrava. Por último hay que destacar las llanuras de inundación, que tienen un origen fluvial pues son desbordamientos de los ríos en sus tramos medios como consecuencia de la horizontalidad del terreno y se conocen en la región con el nombre de tablas.